Eclesiástico 50 1 Simón, hijo de Onías, fue el sumo sacerdote que en su vida reparó la Casa, y en sus días fortificó el santuario. 2 El echó los cimientos de la altura doble, del alto contrafuerte de la cerca del Templo. 3 En sus días fue excavado el depósito de agua, un estanque como el mar de ancho. 4 El cuidó de su pueblo para evitar su ruina y fortificó la ciudad contra el asedio. 5 ¡Que glorioso era, rodeado de su pueblo, cuando salía de la casa del velo! 6 Como el lucero del alba en medio de las nubes, como la luna llena, 7 como el sol que brilla sobre el Templo del Altísimo, como el arco iris que ilumina las nubes de gloria, 8 como flor del rosal en primavera, como lirio junto a un manantial, como brote del Líbano en verano, 9 como fuego e incienso en el incensario, como vaso de oro macizo adornado de toda clase de piedras preciosas, 10 como olivo floreciente de frutos, como ciprés que se eleva hasta las nubes. 11 Cuando se ponía la vestidura de gala y se vestía sus...
"Si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: "Dame de beber", tú le habrías pedido a él, y él te habría dado agua viva." Juan 4,10