La Virgen entregó a San Simón Stock el escapulario carmelita en 1251 y le dijo: “Tú y todos los Carmelitas tendréis el privilegio, que quien muera con él no padecerá el fuego eterno”. Es decir, quien muera con él encima, se salvará. Y luego, la Santísima Virgen se apareció al Papa Juan XXII en el siglo XIV. Y le prometió para quienes cumplieran los requisitos de esta devoción que “como Madre de Misericordia con mis ruegos, oraciones, méritos y protección especial, les ayudaré para que, libres cuanto antes de sus penas, sean trasladadas sus almas a la bienaventuranza”. La historia El escapulario tiene su origen en los hábitos llevados por las órdenes monásticas, a partir de los benedictinos. Y más tarde adoptado por muchas otras comunidades religiosas. Básicamente, se le decía escapulario a un trozo de tela que se llevaba sobre los hombros que caía sobre el pecho y la espalda de la persona con una abertura para la cabeza. En un primer momento el e...
"Si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: "Dame de beber", tú le habrías pedido a él, y él te habría dado agua viva." Juan 4,10