Dejó la Eternidad y vivió en el Tiempo para que yo pudiera dejar el Tiempo y vivir en la Eternidad. Dejó al Padre Eterno en toda Su Gloria para hacerse hombre y dar a conocer la supremacía del Padre sobre toda la humanidad. Él vino como un siervo humilde para reparar el daño de los que dicen, "no serviré". Fue manso de corazón y le dio todo el crédito al Padre por todo lo que hizo y ofreció su humillación voluntaria como una expiación por mi orgullo y mi espíritu de independencia. Él era el Maestro de todos pero nunca obligó a alguno a seguirlo. Su humildad era tan grande, que entendió el odio de Sus enemigos y le pidió a Su Padre que los perdonase. Él gobernó toda la creación y sin embargo se sujetó a José y María como un hijo obediente. Estaba feliz de ser considerado un carpintero inculto , aún cuándo Él había creado el mundo entero. Se puso en manos de dos personas que Él había creado porque vio la voluntad de su Padre en sus órdenes.
"Si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: "Dame de beber", tú le habrías pedido a él, y él te habría dado agua viva." Juan 4,10